Robots para automatizar tareas dentro de las fábricas, robots para agilizar el asesoramiento en el punto de venta, robots para analizar el estado de una zona marítima para la posible explotación de recursos… Los robots van impregnando el día a día de muchos verticales con fines de lo más variopintos. Una situación que disparó la inversión en este nicho tecnológico.
El último informe de la International Federation of Robots nos habla de un récord en el negocio; en 2018 la inversión superó los 16.500 millones de dólares lo que supone más de 422.000 unidades enviadas, un 6% más que en el año anterior. Singapur, Corea y Alemania son los países que lideran la inversión mundial en robots con un clara preferencia por los robots colaborativos (corobots) que aumentaron su demanda un 23% el pasado año. China, por su parte, es y será el mayor productor de robots poniendo en jaque la industria debido a sus malas relaciones con Estados Unidos.
Para este año se espera que el sector esté en línea con lo marcado en el pasado año. Para el intervalo entre 2020 y 2022 el incremento se prevé de un 12% lo que dibuja un panorama de lo más positivo para un futuro cercano.
Los sectores de mayor impacto en la inversión están muy relacionados con la automatización de procesos en industrias como la construcción, minería o salud. De cara a estos próximos años se espera que la penetración crezca en otros verticales como la automoción donde el desarrollo de aplicaciones y funcionalidades incrementarán su adopción.
Más información | Andy Kelly
