La rápida adopción del nuevo formato de almacenamiento SSD se ha visto todavía más acelerada durante el cuarto trimestre de 2019, pasando a ser la tecnología primaria frente a los discos duros tradicionales (o HDD).
Y es que según los últimos datos publicados por CONTEXT, compañía de inteligencia de mercado de TI, actualmente la distribución de los discos duros se habría reducido dentro del canal TI de Europa Occidental a tan sólo un 9,4% del total, en pos de las SSD.
De esta manera, el nuevo formato se habría distribuido en el 93,3% de los nuevos ordenadores portátiles vendidos durante el cuarto trimestre de 2019, frente al 66,7% mostrado hace apenas dos años.
Aunque quizás todavía más sorprendente es su adopción en los ordenadores de escritorio, con una proporción de nuevos dispositivos que alcanzó el 82% a finales del pasado 2019, casi duplicando el 48,5% de presencia mostrado en 2017.
La fuerte caída en el precio por gigabyte observada en 2019 es el principal impulsor de la aceleración de la adopción de SSD, ya que permite a los proveedores vender configuraciones de SSD a precios competitivos”
Dadas estas tendencias, resulta ya seguro asegurar que para finales de este 2020 prácticamente ninguno de los ordenadores portátiles nuevos vendidos a través del canal TI mantendrá los HDD como componente de almacenamiento primario.
Una tendencia que más allá de ser pasajera, se estima se extenderá hasta la totalidad de los dispositivos sobremesa para 2021.
