Llega el fin de año y con él, las previsiones de cara al nuevo calendario. 2025 volverá a ser un año de inversión tecnológica, pero ¿Dónde estarán las prioridades TI? ¿Qué marcarán los presupuestos de las organizaciones? Perfilamos algunas de las áreas clave.
A través del Informe “IT Priorities 2025” de Penteo, vislumbramos que las organizaciones que prioricen la inversión en soluciones tecnológicas, estarán mejor capacitadas para capitalizar oportunidades y mitigar riesgos en un entorno económico caracterizados por el dinamismo y la transformación.
De cara a los próximos meses, las empresas estiman que el presupuesto tecnológico incrementará en un 10% con respecto al 2024, lo cual refleja una tendencia ascendente subrayando la importancia de las TI en el funcionamiento y desarrollo empresarial.
Para el 91% de las empresas la tecnología tiene una percepción estratégica, según los datos recogidos por Penteo, si bien solo el 18% se destinará a estrictamente innovación debido a un enfoque más centrado en la práctica de la rentabilidad. Las organizaciones continúan enfocándose en las tecnologías que fomentan la optimización operativa, la sostenibilidad y la resiliencia frente a riesgos. La Inteligencia Artificial, la automatización avanzada y la ciberseguridad han pasado de ser diferenciadores a convertirse en requisitos básicos para las empresas que buscan mantener la competitividad en el mercado.
El presupuesto tecnológico incrementará en un 10% con respecto al 2024
“Las inversiones tecnológicas para 2025 se centrarán en impulsar la eficiencia y la competitividad, pues las organizaciones ya asumen que las tecnologías innovadoras, la creación de productos y servicios deben responder a las necesidades emergentes y a la diversificación de sus estrategias de mercado”, señala Toni Guerra, Director de Penteo. “La combinación de una visión estratégica y un enfoque en la innovación posicionará a las organizaciones para aprovechar las oportunidades y sortear los desafío presentes y futuros.”
Entre las prioridades TI destaca la Inteligencia Artificial con un 95% de las empresas aumentando la inversión y solo un 4% disminuyéndola, lo que indica una fuerte tendencia hacia la mejora de la tecnología de vanguardia.
La Analítica y Big data también ven un aumento significativo en la inversión (91% de las empresas) quizás basándose en crear el ecosistema necesario para la implantación de IA.
La Ciberseguridad sigue acaparando inversión año tras año, alineado con los objetivos de la empresa de priorizar la seguridad y resiliencia.
Además, en el nuevo entorno digital, el trabajo híbrido y en remoto han alcanzado la madurez impulsando la innovación con herramientas colaborativas y plataformas en la nube. Por su parte, la tecnología orientada a la sostenibilidad va ganando terreno como parte a la respuesta a la demanda de mayor responsabilidad medioambiental y reducción de emisiones. Ambos aspectos continuarán su dinámica de cara a 2025.