El mercado NAND Flash se mantiene en una situación complicada por los efectos que la alta demanda unida a un suministro insuficiente está teniendo en los precios de venta de dicho componente.
Los precios han subido considerablemente y han afectado a piezas clave como las unidades SSD y otras soluciones de almacenamiento basadas en memoria NAND Flash, lo que ha motivado un incremento de precio tanto en componentes de consumo general como en determinados dispositivos, incluidos smartphones, tablets, portátiles y ordenadores.
DRAMeXchange ha realizado un seguimiento bastante completo del mercado NAND Flash y ha comentado que esperan que se alcance el tan esperado equilibrio entre oferta y demanda en 2018, fecha en la que aseguran que se producirá un crecimiento considerable de ambas hasta quedar en una relación de 42,9% y 37,7%, respectivamente.
El principal causante de esa falta de suministro ha sido la dificultad que está suponiendo para los fabricantes de menor peso dar el salto de la producción de memoria NAND Flash 2D a la memoria NAND Flash 3D, un desafío que ha tenido ocupados a esos fabricantes durante 2017 y que ha limitado considerablemente sus capacidades productivas.
Poco a poco la situación ha ido mejorando y una vez que se alcance la madurez necesaria para poder aprovechar al máximo el nuevo proceso de producción de memoria NAND Flash 3D el suministro irá creciendo.
Se espera que en 2018 esa memoria represente un 70% del total utilizado en productos como los que hemos citado anteriormente, una cifra que supone un crecimiento importante frente al 50% de 2017.
Echando un vistazo por fabricantes Samsung sigue liderando el sector de la fabricación de memoria NAND Flash 3D. Dicho tipo de memoria representa más de la mitad de su suministro total en 2017, y se espera que crezca al 60% o 70% en 2018.
Si efectivamente se alcanza ese equilibrio entre demanda y oferta los precios deberían bajar y la escasez de memoria NAND Flash debería dejar de ser un problema.
