Las formas de pago han experimentado una importante evolución con el paso de los años, aunque en España mantenemos un fuerte apego por los métodos más tradicionales. Los resultados que ha publicado Statista así lo confirman.
Como podemos ver en la gráfica adjunta de todas las formas de pago que existen actualmente a nivel de consumo general el efectivo es la más utilizada a la hora de pagar un taxi y de hacer la compra en tiendas de alimentos. También queda como segundo método más utilizado en supermercados.
Sin embargo, pierde terreno cuando hablamos de pagos realizados en tiendas de ropa, grandes almacenes y tiendas de electrónica. En estos establecimientos las tarjetas de débito (con cargo a la cuenta corriente del propietario hasta su límite) y las tarjetas de crédito (permiten gastar hasta el máximo de un determinado préstamo precontratado) son las más utilizadas.
Los pagos con el móvil representan un método de pago minoritario. Sí, se están empezando a utilizar y podemos decir que son algo más que una simple anécdota, pero todavía están en niveles muy bajos y tienen mucho camino por recorrer antes de que podamos llegar a considerarlo como una forma de pago estandarizada o generalizada.
De esta gráfica también podemos deducir conclusiones interesantes. El efectivo es el método más utilizado para compras con importes relativamente pequeños: tiendas de alimentos, carreras de taxi, y el segundo más usado en supermercados e hipermercados.
En tiendas donde los pagos suelen ser mayores, como las tiendas de ropa, los grandes almacenes y las tiendas de electrónica, se recurre al pago con tarjeta. Es comprensible, ya que permite hacer pagos grandes y evitar los problemas que genera tener que llevar una gran cantidad de efectivo encima.
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