Ante las recomendaciones de evitar al máximo el contacto para evitar la propagación del contagio por coronavirus, los pagos a través del móvil proliferan y se consolidan.
Evitar al máximo el contacto físico directo para evitar el contagio por coronavirus está favoreciendo e impulsando los pagos a través del móvil.
Así lo apunta un reciente estudio realizado por Samsung Pay, según el cual, el 32% de los usuarios ha registrado una tarjeta de sistema de pago móvil en los tres últimos meses. Esto está llevando a que los pagos en efectivo estén experimentando un acusado descenso en lo que va de año, especialmente a partir de la propagación de la pandemia por COVID-19 y la puesta en marcha de medidas de contención.
Por el contrario, los sistemas de pago con tarjetas sin contacto han ido en aumento al mismo tiempo que lo están haciendo las aplicaciones de pago móvil.
Según el citado estudio de Samsung Pay, el uso de aplicaciones móviles como su propio e-wallet ya creció el pasado año un 200% y los usuarios activos semanales aumentaron un 131%, lo que ya apuntaba una tendencia al alza.
Batiendo nuevos récords
Este año, a pesar de que el descenso en el consumo, como consecuencia del confinamiento hacía prever que estas cifras no cumplirían con las previsiones iniciales, lo cierto es que, poco a poco, se han ido recuperando los niveles previos a la crisis, e incluso superando cifras el pasado año.
El 32% de los usuarios que ha registrado una tarjeta para pago móvil lo ha hecho en los tres últimos meses.
Si el 32% de los usuarios que han registrado una tarjeta para el pago móvil lo ha hecho en los tres últimos meses, el 43% de los que han registrado con éxito una tarjeta en plataformas de pago móvil apunta que, durante el mes de mayo la han utilizado más a menudo en tiendas físicas.
Y es que, para cuarto de cada cinco usuarios, los pagos sin contacto, o contactless, son una forma más limpia de pagar, ya que el 55% está preocupado por las condiciones higiénicas a la hora de realizas pagos y solo el 37% limpia a menudo sus tarjetas bancarias.
El estudio también apunta que el smartphone es el líder de las transacciones de pago móvil, muy por encima del resto de dispositivos, acumulando casi un 90% de las compras. Por su parte, un 10% utiliza dispositivos wearables, como relojes inteligentes.
Imagen inicial | Jonas Leupe
