Los propietarios de la empresa valenciana Nuevas Tecnologías y Energías Catalá, que comercializa tabletas bajo la marca NT-K, ha presentado una denuncia contra Apple ante la Fiscalía provincial de Valencia por «un presunto delito de extorsión tipificado en el artículo 243 del Código Penal».
Esta demanda, aún pendiente de admisión a trámite, es por ahora el último paso de un litigio que se prolongó durante más de un año y que comenzó cuando Apple ordenó que las tabletas NT-K fueran paralizadas en la aduana de Valencia.
En noviembre de 2010, la compañía de EEUU presentó una denuncia contra Nuevas Tecnologías y Energías Catalá por un delito contra la propiedad intelectual. Apple consideraba que las tabletas de la empresa valenciana eran una copia de su iPad y que, por tanto, tenía que impedirse su distribución. En noviembre del pasado año, El Juzgado de Primera Instancia de Quart de Poblet (Valencia) decretó el sobreseimiento firme de la denuncia interpuesta por Apple al no hallar «justificada la perpetración del delito».
Nuevas Tecnologías y Energías Catalá avanza que la demanda ahora presentada por presunta extorsión irá seguida de otra por daños. Según la compañía, cuando sus tabletas NT-K fueron paralizadas en la aduana se frenaron los precontratos y planes para distribuir más de 15.000 unidades de las mismas. De hecho, las 71 tabletas siguen estando retenidas desde entonces. «Nos han informado de que seguramente dispongamos de ellas en febrero».
Esta empresa española asegura que hay otras afectadas por estas mismas prácticas que no se han atrevido a denunciar debido al acuerdo de confidencialidad que mantienen con Apple.