Más allá de las plataformas on-line, la tienda física tiene un gran poder para los fabricantes. Un interés se convierte en noticia con las declaraciones de Lee Jae-yong, vicepresidente de Samsung. El portavoz asegura que están «en conversaciones de negocio con Best Buy».
Las negociaciones no se sabe por dónde van encaminadas. De momento, lo único desmentido por Samsung es que vaya a hacer una inversión en Best Buy como se especuló, en un primer momento, al escuchar la afirmación del responsable del fabricante surcoreano.
No es la primera vez que Samsung cierra negocios con Best Buy. En abril, Samsung anunció que abriría micro-tiendas dentro de los establecimientos estadounidenses del retailer americano. Así, puede que estas conversaciones estén encaminadas a seguir buscando nuevas alternativas que potencien los productos de la casa Samsung en el canal.
Tienda física, clave para fabricantes
Samsung no es el único que ha buscado como aliado a Best Buy. Microsoft anunció la apertura de 600 tiendas dentro de los comercios Best Buy con el mismo objetivo: mostrar su potencial en este gigante. De hecho, el anuncio ya se ha materializado con la primera tienda Windows Store abierta en Estados Unidos.
Pero todo esto son solo síntomas de lo que da una tienda física. Aunque el auge del comercio electrónico es imparable, todavía los fabricantes necesitan estos escaparates para sus productos. Las marcas utilizan estos expositores para dejar a los consumidores probar, tocar, ver y sentir la experiencia tecnológica que ofrecen sus novedades.
Aunque las tiendas físicas no estén pasando por su mejor momento, los mostradores y carteles publicitarios que tienen Microsoft, Apple o Samsung son el mejor ejemplo para demostrar que todavía hay larga vida. Una trayectoria en la que los propios fabricantes serán los grandes propulsores.
