
Durante el tercer trimestre de este año 2025, la venta de PCs crecieron un 9,4% con respecto al mismo periodo de 2024. En total, el volumen de ventas de equipos llegó a los 75,8 millones de unidades, según los resultados preliminares del tracker Worldwide Quarterly Personal Computing Device de la consultora IDC.
Pro regiones, la venta de PCs en la región de Asia/Pacífico, incluidos Japón y China, registró un crecimiento de dos dígitos: un 14%, lo mismo que en la región de EMEA. Este crecimiento contrasta con el registrado en el continente americano, de solo un 1%. Este escaso crecimiento se debe a distintos motivos, entre los que están los geopolíticos y la incertidumbre generada por los aranceles en Estados Unidos.
Por fabricantes, Lenovo sigue ocupando el primer lugar en venta de PCs, con un 15% del total de las ventas. Le siguen HP, con un 15,4% del total de ventas, y Dell, con un 10,1%. En cuarto lugar se sitúa Apple, con un 6,8% de las ventas, y en quinto Asus, con un 5,9%. El resto de fabricantes suman entre todos un 18,6% de la venta de PCs entre julio y septiembre.
Jean Philippe Bouchard, Vicepresidente de investigación de Worldwide Mobile Device Trackers de IDC, ha señalado que «aunque el mercado en su conjunto sigue experimentando un año muy sólido, impulsado por la transición a Windows 11 y la necesidad de sustituir una base instalada obsoleta, los resultados por regiones muestran situaciones diferentes. En particular, el mercado norteamericano sigue viéndose afectado por el impacto de los aranceles de importación de Estados Unidos y por las incertidumbres macroeconómicas. Aunque existe, es probable que la demanda de nuevos ordenadores preparados para Windows 11 se prolongue hasta bien entrado 2026«.
Por su parte, Maciek Gornicki, Director senior de investigación de Worldwide Device Trackers de IDC, ha subrayado que «la demanda se vio impulsada en gran medida por la renovación del hardware en Japón, vinculada al fin del soporte técnico de Windows 10 y al proyecto educativo GIGA. El crecimiento fuera de Japón fue más modesto, obstaculizado por los retos macroeconómicos y políticos y la lenta adopción de Windows 11, aunque hubo oportunidades puntuales gracias a la renovación del hardware de los dispositivos adquiridos durante y antes de la pandemia de COVID 19«.





