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Los ultrabooks no consiguen las ventas esperadas

Cuando el CEO de Intel, Paul Otellini, presentó el pasado mes de mayo a unos inversores sus Ultrabooks (portátiles ultrafinos), muchos pensaron que serían toda una revolución. Su diseño ultra fino recordaba mucho al  MacBook Air de Apple, un dispositivo que ha cosechado gran éxito en el mercado.

Los ultrabooks no consiguen las ventas esperadas

A pesar de todo, la creencia parece algo errónea, tanto Acer como Asustek, compañías que ya venden ultrabooks en Taiwán, se han encontrado con ventas por debajo de lo previsto. Ambas compañías han tenido que reducir sus previsiones de ventas para este año, pasando de esperar vender entre 200.000 y 300.000 unidades a unas 100.000 unidades.

¿Cuál es la razón del fracaso? Lógicamente el precio que tienen estos pequeños y delgados ordenadores. Y es que, mientras que los portátiles ultrafinos de Asustek se venden en Taiwán por 1.200 el de 11,6 pulgadas y 1.675 dólares el de 13,6 pulgadas, su mayor competidor MacBook Air, puede conseguirse por 999 dólares (11,6 pulgadas) y 1.299 dólares (13,6 pulgadas).

Como es de esperar, los consumidores se decantan por el modelo de Apple. Por supuesto, la mala noticia perjudica notablemente a Intel, quien ha invertido mucho dinero en que los ultrabooks puedan ser una realidad. Habrá que esperar a ver si finalmente estos dispositivos consiguen su hueco en el mercado o quedan relegados a un segundo plano, eclipsados por los MacBooks Air de Apple y otros dispositivos como tablets o smartphones de última generación.

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