El negocio global dentro de la división Enterprise Computing Solutions se resiente en Arrow. El mayorista ha mostrado sus balance para el segundo trimestre, finalizado el 1 de julio de 2017, donde las ventas de esta unidad cayeron un 6% hasta alcanzar los 2.000 millones de dólares. En Europa la bajada de esta área es más sangrante. No obstante, gracias a sus otros negocios, sus resultados globales aumentaron un 8% en su tasa interanual.
El comportamiento global de Arrow ECS, que opera en España, continúa como comenzó el año. Los beneficios un 2% menores a los del mismo intervalo de 2016, Michael J. Long, CEO de la corporación, los achacaba al descenso de la tecnología heredada que no compensa con el crecimiento del software para infraestructura y cloud.
Arrow acumula pérdidas operativas de 421.500 de dólares
A nivel general, Arrow ha reportado unos ingresos de 6.470 millones de dólares para el segundo trimestre, un 8% más que en mismo trimestre del pasado año. La cifra ha venido dada, sobre todo, por el impulso del 16% entorno a su división de componentes que obtuvo unos ventas de 4.460 millones de dólares.
Los números positivos no han sido suficientes para mantener el nivel de inversión para adaptarse al nuevo modelo de distribución lo que le ha llevado a obtener unas pérdidas operativas netas de casi 230.000 de dólares durante este trimestre.
Si la referencia es la primera mitad del año, vemos que las ventas han crecido ligeramente desde los casi 11.450 millones de dólares en este periodo de 2016 hasta los 12.200 millones de dólares en 2017. Una crecida insuficiente que le ha llevado a unas pérdidas acumuladas durante estos seis meses de 421.500 de dólares.
El negocio en Europa
El comportamiento general del mayorista se refleja en el negocio europeo que incluso empeora en la división ECS. La distribución de esta unidad en Europa cayó un casi un 11% hasta quedarse en este trimestre con un negocio de 642.000 millones de dólares. En el caso de los componentes subió un 12% hasta los 1.192 millones de dólares.
La primera mitad del año la caída de la división ECS en Europa fue de 8,9% hasta 1.209 millones de dólares. En el caso de los componentes la facturación creció 2.310 millones de dólares, un 9,2% más que el año anterior.
En la perspectiva general del negocio para el tercer trimestre de 2017, el mayorista espera que las ventas se sitúen entre los 6.325 millones y 6.725 millones de dólares con unas ventas de la unidad de componentes ligeramente más altas -entre los 4.400 millones y 4.600 millones de dólares- y del área ECS de entre 1.925 millones y 2.125 millones de dólares.
Imagen | Aaron Burden
