El conocido fabricante Corning está haciendo esfuerzos por diversificar su mercado llevando sus soluciones Gorilla Glass al mercado del automóvil, un sector que como sabemos está en una unión cada vez más profunda con el sector tecnológico.
Esa vinculación entre automóviles y tecnología está favoreciendo la utilización de pantallas en los coches con las que interactúa el usuario a diario, y dichas pantallas necesitan estar protegidas adecuadamente para evitar daños y desgastes derivados del uso.
Con esto en mente podemos entender a la perfección porque Corning ha visto mercado en el sector del automóvil para sus soluciones Gorilla Glass, que se perfilan como esa protección que necesitan las pantallas de los coches para no sufrir arañazos ni desperfectos.
Según ha confirmado la propia Corning esperan que para 2020 hayan alrededor de 69 millones de coches conectados, y que la proporción de coches con pantalla llegue casi a triplicarse para el año 2024.
A nivel de producción y costes han confirmado que el cristal Gorilla Glass puede fabricarse siguiendo un proceso en frío que ayuda a reducir los costes, y que además pueden producir unidades con un grosor de apenas tres milímetros sin tener que sacrificar durabilidad y resistencia, claves que lo convierten en una excelente opción para proteger pantallas de automóviles.
Es evidente que con esas previsiones el potencial que representa el mercado del automóvil para Corning es muy grande, y que a lo largo de los próximos años podría acabar representando una parte importante de sus ingresos, aunque sin llegar a superar al mercado smartphone y tablet que seguirá siendo su principal fuente de negocio.
