Las pantallas curvas se han convertido en uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta a la hora de elegir un monitor. En sus inicios este tipo de pantallas generaron una gran expectación debido no solo a su evidente atractivo a nivel estético, sino también por las ventajas que pueden llegar a ofrecer frente a las pantallas planas tradicionales.
Esta realidad no pasó inadvertida a gigantes como LG, quien decidió apostar con fuerza por los monitores con pantallas curvas desde el principio y dar forma a un amplio portafolio de productos que hoy integra soluciones profesionales, modelos para consumo general y también para gaming.
Los monitores con pantallas curvas se han convertido, por tanto, en un producto que está al alcance de cualquier tipo de usuario, gracias a la diversificación que han llevado a cabo fabricantes de primer nivel como LG, pero… ¿Conoces todas las ventajas que ofrecen frente a los monitores con pantalla plana? Pues sigue leyendo, que este artículo te interesa.
Un poco de historia: el debut de las pantallas curvas
La llegada de las pantallas curvas al mercado de consumo general se produjo en 2013, un año que marcó el debut de esta tecnología aunque de forma limitada, ya que al tratarse de una novedad importante los costes que presentaba eran elevados, y por tanto no estuvo al alcance de todos los bolsillos.
Con el paso del tiempo las pantallas curvas se fueron «democratizando». En este sentido LG ha jugado un papel muy importante gracias a su división LG Display, uno de los líderes indiscutibles del sector que fabrica paneles LED y OLED de alta calidad, tanto en versiones planas como curvadas. La inversión en I+D y las mejoras a nivel de procesos productivos que logró LG Display permitió elevar la tasa de éxito en la fabricación de pantallas curvadas, y acabó haciendo que esta tecnología estuviese al alcance de todos.
Los precios de los monitores con pantallas curvas han bajado y esto ha mejorado su atractivo de cara a consumidores de todos los perfiles, tanto profesional como de consumo general, ya que ve en ellos una relación calidad-precio mucho más razonable.
Pantallas curvas: ¿cómo marcan la diferencia?
Hay muchas tecnologías aplicadas a monitores que pueden marcar diferencias importantes. Por ejemplo, los monitores LG Ultra Wide ofrecen un 32% más superficie de visión que un monitor estándar, y los paneles IPS de la compañía consiguen una mayor calidad de imagen, una reproducción más precisa del color y un ángulo de visión perfecto en 178 grados.
Ya hemos hablado de este tema en artículos anteriores, ¿pero qué hay de las pantallas curvas? Como dijimos LG también ha apostado por esta tecnología en sus monitores porque ofrecen ventajas importantes:
1.-Mejoran la inmersión
Este efecto resulta más marcado cuanto mayor es el tamaño del monitor. Es, sin duda, uno de los grandes atractivos que ofrecen las pantallas curvadas y resulta beneficioso tanto para entornos profesionales como para clientes dentro del mercado de consumo general.
Por ejemplo, un monitor con pantalla curvada puede ayudar a un profesional a sumergirse mejor en su trabajo y a concentrarse. En el caso de un usuario particular disfrutará de una mayor inmersión en contenidos multimedia y juegos, lo que se traducirá en una experiencia de uso superior.
2.-Campo de visión más amplio
Los monitores con pantallas curvadas nos permiten disfrutar de un campo de visión más amplio gracias al efecto que produce la curvatura, y al mismo tiempo reducen la distorsión que normalmente se produce en los bordes de la pantalla.
Esto tiene una explicación sencilla. Una pantalla plana proyecta las imágenes en línea recta mientras que las pantallas curvadas orientan dichas imágenes hacia el usuario, lo que permite reducir ese efecto borroso y de distorsión al que hacemos referencia.
3.-Mayor comodidad y menor fatiga ocular
Un monitor puede ser una herramienta de trabajo que utilizamos durante horas, y también un elemento fundamental para nuestros ratos de ocio que utilizamos durante periodos prolongados. Con esto en mente es fácil entender la importancia que tiene hablar de comodidad y de fatiga ocular asociada a monitores.
Los monitores con pantallas curvas se ajustan mejor al campo de visión natural del usuario y generan un menor cansancio ocular. Esto los convierte en una excelente opción para profesionales que pasan muchas horas seguidas pegados a la pantalla, y también para particulares que devoran contenidos multimedia o que disfrutan de largas sesiones de gaming.
4.-Se percibe un mayor tamaño de pantalla
La curvatura puede generar un efecto muy interesante en el usuario, y es que éste acabará percibiendo un mayor tamaño de pantalla. Dicho de otra forma, tendrá la sensación de que el monitor es más grande de lo que realmente es.
Esto tiene efectos beneficiosos tanto a la hora de trabajar como de disfrutar de juegos y contenidos multimedia, y unido a la mejora a nivel de inmersión que consiguen las pantallas curvas representa un gran valor.
5.-Menos reflejos
Aunque depende de la estancia y de la iluminación las pantallas curvas consiguen, en la mayoría de los casos, reducir los reflejos. Esto es importante, ya que los reflejos pueden ser muy molestos y afectar a la experiencia de uso.
Disfrutar de menos reflejos equivale a una menor fatiga ocular, mejor legilibilidad y un consumo más bajo, dado que es necesario menos nivel de brillo para disfrutar de buena calidad de imagen.
Notas finales: ¿a quién se dirigen las pantallas curvadas?
En general para cualquier tipo de usuario, ya que como hemos podido ver ofrecen ventajas tanto a nivel profesional como de consumo. Por ejemplo, un abogado que pase muchas horas redactando y buscando jurisprudencia que opte por utilizar un monitor con pantalla curva disfrutará de una mayor inmersión, una menor fatiga ocular y de una mejor experiencia de uso en general.
Por su parte un usuario que quiera utilizar un monitor curvo para reproducir contenidos multimedia o juegos también disfrutará de una mayor inmersión, una menor fatiga ocular y de una mayor calidad de imagen en los extremos del monitor.
