Dependiendo de los requisitos y necesidades, un servidor propio es la mejor solución para una empresa por diferentes motivos: accesibilidad, control de los datos, independencia, privacidad y, por supuesto, ahorro son algunos de ellos. Los pasamos a ver.
Aunque el coste inicial pueda ser superior a contratar un servicio en línea, el retorno de la inversión en el corto y medio plazo compensa con creces, incluso aunque se pretenda escalar la infraestructura a medida que el negocio crece. Veamos cuáles pueden ser las ventajas:
Accesibilidad
Un servidor propio permite gestionar todos los usuarios y sus contraseñas, establecer políticas de caducidad de contraseñas y complejidad de las mismas, lo que mejora la seguridad dentro de la empresa.
Además, se puede minimizar el número de credenciales dentro de la red, lo que facilita la gestión de usuarios y contraseñas, incluso en los casos que se requiere acceder de forma remota, si los empleados están teletrabajando o en diferentes sedes.
Control de datos
Tener un servidor propio permite tener un control total sobre la seguridad de los datos y la información de la empresa. Esto implica tener una visión completa de la información y poder gestionar accesos, implementar medidas de ciberseguridad o de protección de la red.
Independencia
Tener una disponibilidad 24×7 es un servicio cada vez más demandado por las empresas que necesita que su negocio no pare. Una posibilidad que, aunque también es ya ofrecida por muchos proveedores cloud, es mucho más eficiente si tenemos el servidor en casa. Con ello, podemos ofrecer una independencia mayor al cliente.
Privacidad
Al tener un mayor control de los datos, el servidor propio permite que haya un menor riesgo de filtración de datos y que se pueda dar una mayor seguridad.
Ahorro
Aunque la inversión inicial en un servidor puede ser alta, a largo plazo puede resultar en un ahorro significativo. Tener un servidor propio permite ahorrar en costos de almacenamiento en la nube y en servicios de terceros.
Además, el servidor permite mejorar las capacidad escalables de las empresas, dar más flexibilidad y todo ello, ajustando los costes a largo plazo.
Copias de seguridad
Cuando tenemos todos los datos en un servidor, se facilita enormemente la gestión y el mantenimiento de las copias de seguridad. Así, solo se debe supervisar, controlar y monitorizar un único sistema que contiene todos los datos.
Además, se puede crear una red para mantener la estrategia 3, 2, 1 (3 copias en 2 ubicaciones y 1 fuera de la red) que permite garantizar la continuidad de negocio en cualquier situación.
Cumplimiento normativo
La gobernanza de datos es otro de los retos implícitos en una estrategia de almacenamiento. Un aspecto donde el cumplimiento de las normativas de privacidad y seguridad de datos es fundamental.
Así, con un servidor se pueden establecer políticas de privacidad y controlar quién tiene acceso a los datos y la información, garantizando que se cumplen todas las leyes.
