Detrás de la IA Agéntica: solo el 12% de las organizaciones españolas cree estar preparada para su implantación

En la era digital actual, la inteligencia artificial está en boca de todos como aliada clave para la competitividad de las empresas en múltiples sectores. Sin embargo, su adopción debe ir más allá de la simple implementación de algoritmos avanzados. El verdadero éxito radica en contar con una infraestructura de datos sólida y una estrategia bien integrada que permita a la IA no solo analizar información, sino actuar de manera autónoma y efectiva dentro de la organización.

El avance de estas soluciones es muy rápido, por lo que se tiende a pasar por alto la falta de cualificación en torno a esta tecnología. Además, los problemas de gobernanza y la escasez de recursos obstaculizan su implantación, haciendo que muchos proyectos se queden estancados en la fase de planificación. De hecho, un 27% de las compañías españolas ha tenido hasta 50 proyectos en desarrollo que han parado por completo, según la última encuesta de Qlik.

No obstante, el desarrollo de nuevas soluciones no se ha detenido y ha surgido un nuevo concepto: la IA agéntica.

Los sistemas autónomos ya están aquí: toma de decisiones y aprendizaje

La IA agéntica se refiere a sistemas de inteligencia artificial con alto grado de autonomía, capaces de tomar decisiones, planificar acciones y aprender de la experiencia para alcanzar objetivos sin supervisión constante. Pueden actuar de forma independiente, organizando su propio flujo de trabajo y aprovechando las herramientas disponibles. A diferencia de los modelos de lenguaje tradicionales, la IA agéntica puede adaptarse a nuevos datos, planificar y ejecutar tareas complejas, interactuar con soluciones externas y mejorar mediante aprendizaje continuo. Esta combinación de flexibilidad y precisión permite integrarla en procesos empresariales, automatizando decisiones y optimizando operaciones.

Mientras que los modelos de lenguaje destacan en la generación y comprensión de texto natural, la IA agéntica interpreta el contexto y toma decisiones autónomas, siendo ideal para escenarios donde la programación tradicional no puede anticipar todas las variables, facilitando la automatización de procesos complejos.

Sin embargo, la mayoría de las empresas españolas no están preparadas para integrar la IA de forma exitosa en el núcleo del negocio. El estudio revela que el 86% de los responsables de la toma de decisiones considera la IA esencial o muy importante, pero pocos proyectos pasan de la planificación a la implantación, y muchos se desechan. Un 37% de las empresas tienen entre 11 y 50 proyectos en fase de definición o planificación que aún no son reales.

Estos datos subrayan la necesidad de mejorar la gobernanza de datos, contar con una infraestructura escalable y estar preparados para el análisis, a fin de desbloquear el potencial transformador de la IA. No basta con soluciones aisladas; es fundamental apostar por plataformas abiertas y neutrales que ofrezcan flexibilidad e integración en entornos híbridos, ya sea cloud, on premise, privado o público. Las organizaciones que prioricen la interoperabilidad y eviten depender exclusivamente de tecnologías propietarias maximizarán el poder de la IA a largo plazo, tanto en su forma generativa como agéntica.

Qlik colabora de forma activa en el Plan de divulgación tecnológica en España impulsado por la Asociación @aslan. Este programa reúne cada año a más de 10.000 profesionales de empresas y administraciones públicas que buscan conocer las últimas tendencias en innovación digital y ciberseguridad.

José Andrés García Bueno, Country leader para España y Portugal de Qlik

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