Comprar por Internet es cada día una realidad más presente en España. Tanto es así que nuestro país se sitúa en el cuarto país europeo con más ventas a través del comercio electrónico. Concretamente, el negocio alcanzó en 2012 los 12.969 millones de euros, según datos de la Asociación Española de la Economía Digital.
Los ingresos por venta de bienes y servicios a través de la Red crecieron un 19% en 2012. Tanto es así que la cifra total llegó a los 311.600 millones de euros. De estos, más de 12.969 millones fueron negocios de empresa a cliente final.
La evolución alcista del comercio electrónico fue una tónica general en todo Europa con crecimientos del 18%. Gran Bretaña, Alemania y Francia fueron los líderes de este impulso. De hecho, el 61% del negocio e-commerce europeo se genera a través del B2C lo que generó 191.000 millones de euros.
Por su parte, el número de páginas web también se ha visto aumentado hasta superar las 550.000 a finales de 2012, con un ritmo de crecimiento de entre un 15 y un 20%. Este desarrollo será previsiblemente mayor gracias al potencial, entre los que se destaca España junto a Italia, Polonia, Rusia, Ucrania o Turquía.
Un futuro prometedor
Así, Europa se consolida como el mayor mercado de comercio electrónico del mundo European Ecommerce, el grupo global bajo el que se encuentra la aDigital, calcula que el negocio global del comercio electrónico B2C a nivel mundial asciende a los 889.000 millones de euros.
European Ecommerce estima que el negocio en Internet representa el 3,5% del Producto Interior Bruto en Europa. Previsiblemente, este porcentaje se duplicará en 2016 y triplicará en 2020, un crecimiento superior al de la economía general de la zona europea.
Con estos datos es evidente que la apuesta por el comercio electrónico ya no es algo que dejar para el futuro. Comenzar a pensar en la multicanalidad, las aplicaciones móviles o la tienda on-line es algo que debemos hacer ahora porque la transformación es un tren que no debemos dejar escapar.