El mercado de las cámaras fotográficas no lo está pasando especialmente bien. Pese a los intentos por resurgir con las cámaras mirrorless (sin espejo), Nikon ha admitido que las ventas han sido decepcionantes. Estados Unidos y Europa se han llevado la peor parte pese a que estos dispositivos son más ligeros y baratos.
A este respecto, Yasuyuki Okamoto, presidente de la compañía comento:
«En Europa y Estados Unidos la proporción de las cámaras réflex mirrorless no ha crecido en absoluto, al contrario de lo ocurrido en Asia, donde es muy popular entre las mujeres debido a la luz que conseguía, por lo que teníamos las mismas expectativas para otras regiones. Pero a la gente que le gusta las cámaras de fotos tienden a comprarse una réflex SLR, a pesar de su peso».
Los fabricantes de cámaras japoneses esperaban que los dispositivos mirrorless podrían animar las ventas tras la continua caída de las cámaras compactas, ya que los consumidores cada vez más las sustituyen por los smartphones de alta resolución.
Pero, hasta ahora, solo han visto fuertes ventas de cámaras mirrorless en su propio país, donde los envíos crecieron un 16,8% en los seis primeros meses del año, mientras que han caído un 18,5% a nivel mundial, según la CIPA de Japón. Los envíos de cámaras compactas se desplomaron un 48%.
