Estamos a menos de dos meses del lanzamiento de Windows 10, el nuevo sistema operativo que alcanzará a un amplísimo número de dispositivos, desde sistemas embebidos a móviles, tablets o PCs, cajeros automáticos, Xbox o grandes estaciones de trabajo.
El PC es prioritario y el primer Windows 10 en ser liberado el 29 de julio será el destinado a ordenadores personales y tabletas electrónicas. Después, en cascada, todas las demás incluyendo la importante versión para smartphones con la que Microsoft espera recuperar terreno en movilidad frente a Android y el iOS de Apple.
Además de las versiones cliente, Microsoft está preparando otra importante edición del sistema, la destinada a la empresas Windows 10 Enterprise que también contará con importantes novedades y que vamos a repasar en este artículo tras haber probado la Technical Preview, versión de prueba disponible para descarga desde el portal de Microsoft, en versiones de 32 y 64 bits.
Windows 10 Enterprise incluirá las nuevas características de la versión estándar Windows 10, como la mejora de la interfaz de usuario para usos con teclado y ratón con el regreso del menú de inicio; el uso de escritorios virtuales; el asistente Cortana; el navegador Edge o el modo Continuum.
Mejoras visibles aunque las importantes de la versión estarán «bajo el capó» y básicamente permitirán a las empresas implementar y administrar el sistema operativo con mayor facilidad que en versiones anteriores. Windows 10 permitirá que los dispositivos se conecten a Azure Active Directory (AD) añadiendo el soporte actual en Windows para la versión tradicional de AD. Los usuarios serán capaces de iniciar sesión en Windows con cuentas Azure AD y será capaz de mezclar ambos, AD y Azure AD juntos.
También importantes la ampliación de las opciones de gestión de dispositivos con la mente puesta en favorecer el fenómeno BYOD permitiendo a los administradores inscribir dispositivos de forma automática en un servicio MDM, añadiendo mayor flexibilidad en todos los escenarios.
Windows 10 Enterprise incluirá soporte para la gestión de múltiples usuarios que comparten un único dispositivo, el control total de la Windows Store, redes privadas virtuales VPN, capacidad de borrado de dispositivos y la configuración de las políticas de protección de datos empresariales.
También será más fácil de desplegar. El sistema operativo tendrá los mismo requisitos de hardware de Windows 7 y 8, lo que significa que las empresas deben ser capaces de actualizar la mayor parte de sus PCs actuales. El sistema soportará actualizaciones in-situ, es decir, los administradores no tendrá que limpiar sistemas operativos anteriores en un PC antes de instalar Windows 10. Además, la actualización preservará todas las aplicaciones, datos y las configuraciones de la versión de Windows que se sustituye.
En cuanto a seguridad, Windows 10 Enterprise contará entre otras, con una nueva función de autenticacion de dos factores que tratará el dispositivo como un factor y un PIN de usuario o una firma biométrica (como una huella digital) como otra. El sistema operativo separará datos personales y corporativos, otro elemento muy útil en entornos BYOD. Además, los departamentos TIC podrán decidir si retrasar la implementación de nuevas características, actualizando solo los parches de seguridad.
En definitiva, Windows 10 para empresas avanzará de forma notable en gestión y administración, facilitando el despliegue en compañías grandes y pequeñas, uno de los grandes objetivos de Microsoft una vez que Windows 8 no ha acabado de calar en entornos empresariales.
Los profesionales TI o usuarios avanzados interesados pueden probar Windows 10 Enterprise Technical Preview. No se conoce si la edición estará disponible al mismo tiempo que la versión cliente, el 29 de julio. Windows 10 Enterprise solo estará disponible a través de licencias en volumen y mantendrá los derechos de downgrade actuales a Windows 7 Enterprise y Windows 8.1 Enterprise.