iPhone 7, los últimos móviles inteligentes de Apple, están perdiendo interés entre los consumidores una vez pasado el boom del lanzamiento, explica el analista de KGI Securities, Ming-Chi Kuo.
El analista especializado en la firma de Cupertino y con notables aciertos en sus predicciones, comenta que los proveedores van a revisar a la baja (entre un 5 y un 15 por ciento) los pedidos de iPhone 7 para los meses de noviembre y diciembre.
Una vez pasado el lanzamiento, la demanda está siendo más baja de la esperada y Kuo espera una disminución de ventas interanuales en el primer trimestre de 2017. Y ello a pesar de los graves problemas de Samsung con un terminal destinado a ser un superventas competidor como el Galaxy Note 7.
La bajada de interés por los terminales de Apple es conocida y estaría derivada de la falta de mejoras significativas de las últimas versiones. El usuario habitual de Apple que ya tiene un iPhone no lo renueva con la asiduidad de años anteriores y el típico consumidor de Android, está cómodo en una plataforma y oferta amplísima y no se «cambia» tan fácilmente a Apple.
La crisis económica de algunas regiones, la competencia que llega desde China, la saturación de la gama alta y una gama media sobresaliente en características/precio, impiden que las ventas de iPhone sigan subiendo al menos hasta la llegada de los iPhone 8, estos sí con grandes novedades como la pantalla OLED y un diseño completamente renovado.
