Amazon ha anunciado la entrega de su primer pedido comercial con drone. Un paso hacia delante para el uso de aviones no tripulados en tareas de logística.
Aún recordamos las bromas de usuarios y rivales en Internet cuando en diciembre de 2013 el CEO de Amazon, Jeff Bezos, anunció «Prime Air: la logística que volaba», la propuesta de envío de paquetería mediante vehículos áereos no tripulados.
La entrega del primer pedido comercial con drone, consistente en un streamer Amazon TV y una bolsa de palomitas, solo ha tardado tres años en llegar y aunque se ha tratado de una entrega en fase de prueba, limitada y controlada, ha sido una muestra real de lo que Amazon pretende realizar en el futuro.
La prueba se ha llevado a cabo en el Reino Unido (uno de los pocos países donde se ha autorizado a Amazon las pruebas con drones) y ha tardado exactamente trece minutos desde que el cliente ha pulsado el botón de compra, un humano lo ha recepcionado y preparado el paquete, el drone lo ha recogido y lo ha dejado en un punto del jardín del cliente localizado automáticamente con cámara y GPS. Una vez entregado, el drone vuelve a volar y regresa al almacén.
Amazon Prime Air promete entregar los pedidos en menos de 30 minutos desde la compra, en un rango máximo de 16 kilómetros desde el almacén de la compañía y con paquetes de hasta 2,3 kilogramos.
Obviamente, la entrega con drones no será mayoritaria y aún quedan desafíos tecnológicos y normativos, pero es una apuesta de futuro que como vemos puede funcionar y como dicen los responsables de Amazon: «Un día, ver los vehículos Primer Air será tan normal como ver camiones de correo hoy en una carretera».
