Los esfuerzos de NVIDIA para impulsar las ventas de gráficas dedicadas de marca propia, «Founders Edition«, puede afectar a la rentabilidad de proveedores terceros y socios, según fuentes del sector.
NVIDIA introdujo en la actual generación de gráficas con arquitectura «Pascal», modelos propios que comenzaron a venderse antes incluso que se comercializaran los modelos personalizados de sus socios sobre el chip básico.
Las «Founders Edition« se han vendido muy bien y lo siguen haciendo, compitiendo directamente con las personalizadas de las grandes del sector, MSI, ASUS, Gigabyte, Palit Microsystems, Zotac o Colorful. NVIDIA también compite «contra» sus socios en gráficas integradas en PCs, recuerdan las fuentes.
Excluyendo NVIDIA, la suma de los beneficios obtenidos por los seis primeros proveedores de tarjetas gráficas dedicadas ascendió a 160 millones de dólares en 2016, animando al gigante verde a entrar en el mercado con tarjetas propias.
Como otras líneas propias de las fabricantes en otros segmentos, léase los 2 en 1 Surface de Microsoft o los smartphones Pixel de Google, es difícil saber hasta qué punto ese tipo de producto ayuda a impulsar toda la plataforma o efectivamente, reduce las ventas y beneficios de los fabricantes terceros, socios y aliados de las grandes tecnológicas pero que en casos como estos pueden sentirse perjudicados.
