Hace tiempo que muchos smartphones incorporan una función de reconocimiento facial como fórmula de seguridad o un software de cálculo de edad. Mucho antes las cámaras más avanzadas comenzaron con la detección de rostros e incluido algunos como Lenovo hicieron pruebas en sus equipos allá por 2010. Una tecnología para nada nueva pero que ha ido mejorando y demostrando que en el futuro puede ser clave para conocer a los clientes.
Muchas empresas especializadas o no están aprovechando el reconocimiento facial para hacer negocio o aportar valor al que ya tienen. Entre las compañías que están avanzando en este terreno destacamos a algunos, no como pioneras en la tecnología pero si, como propulsores de algo todavía incipiente. De hecho, empresas como Orna Solutions, que lleva tiempo en el sector, ya vaticinaban que en 2016 comenzaría a despertar el sector «prácticamente desconocido». Y así sucedió, al menos, como una tecnología que comenzaba a tener visos de ser un negocio real.
El valor del reconocimiento facial
El recurso de reconocer a los usuarios y aportar más datos alrededor de una fotografía todavía no se está desarrollando en exceso en el área comercial. La autentificación, la búsqueda de imágenes o simplemente los primeros pinitos de innovación son los usos más extendidos del reconocimiento facial.
Google, Amazon o PayPal ya experimentan con tecnologías de detección
El servicio Amazon Rekognition fue presentado el pasado año en el evento anual de la casa para desarrolladores. Una herramienta, dentro de Amazon Web Services, que reconoce rostros, objetos o escenas basándose en el análisis y aprendizaje inteligente. Desde está se puede obtener datos como el género, edad o estado de ánimo.
Por su parte, Microsoft hace sus pinitos con How-Old.net. Una web abierta a cualquier usuario desde la que se puede calcular la edad con un rango de acierto bastante alto. Trasladar esta innovación a negocio puede ser el siguiente paso.
Google lleva más allá el reconocimiento utilizando otros parámetros de salud para conocer las reacciones de los usuarios de cara a la personalización de búsquedas y contenidos. Aunque por el momento es tan solo una patente es un avance de lo que puede estar por llegar.
En el terreno de los pagos móviles también se está experimentando para que el reconocimiento del usuario sea una prueba más de seguridad. Alibaba fue el primero, después se apuntaron otros como el propio Amazon, PayPal o Mastercard. Y es este último el que anunció que traería el pago vía selfie a España.
El panorama de innovación demuestra que el reconocimiento de individuos cuenta con muchos pretendientes. Candidatos a abanderar la tecnología en pro del análisis de información de los usuarios. Una método que en un futuro no muy lejano podrá ayudar a saber más de los consumidores, anticiparse a sus necesidades, proteger su identidad y añadir nuevos servicios en base a la personalización. Y eso en ámbitos que solo los partners especializados pueden ayudar a descubrir.