Samsung sigue vendiendo smartphones a buen ritmo y sus nuevos tope de gama, Galaxy S9, han tenido un buen estreno con ocho millones de unidades en el primer mes de comercialización, según los datos de Canalys. No está nada mal teniendo en cuenta la situación general de la industria del móvil.
Los ventas de los Galaxy S9 son muy similares a los del Galaxy S8, aunque están por debajo de lo logrado con la serie S7. En la proyección anual, la firma de análisis estima que Samsung venderá 45 millones de unidades. 4 millones más que los de S8 y ligeramente por debajo de S7.
En cuanto a regiones de venta, 2,8 millones de unidades se vendieron en Estados Unidos, mientras que en su país de origen, Corea del Sur, se vendieron 1 millón de unidades.
Sus dos modelos estándar y plus, siguen la línea de diseño de los Galaxy S8, si bien con distintas mejoras en todos apartados. Línea continuista con base en la pantalla “Infinita” sin bordes, formato 18.5: 9 y el panel Super AMOLED, repitiendo los mismos tamaños de pantalla de 5,8 y 6,2 pulgadas de la generación anterior. Sí se ha actualizado el motor hardware con el chipset móvil más potente de Qualcomm, Snapdragon 845 y lo mejor que tiene Samsung en hardware propio, el Exynos 9810 de 10 nanómetros.
Samsung ha prestado especial atención a mejorar el sistema de cámaras, con doble sensor en la cámara principal del modelo Plus. También mejorado el sistema de audio en colaboración con AKG y con una nueva base de expansión denominada DeX Pad, que será el complemento para los que busquen utilizar el terminal más allá de sus funciones de móviles inteligentes, como un PC con Linux.
Aún sin ofrecer cambios revolucionarios, todos los análisis estiman que los Galaxy S9 son terminales sobresalientes y de lo mejor que se puede comprar en la plataforma Android. No extraña su alto nivel de venta a pesar de su coste y la situación del sector del móvil.
