Si no te gusta Windows 8, no te preocupes, no estás solo. Los mismos empleados de Microsoft no están entusiasmados con el sistema operativo y se refieren a él como ‘el nuevo Vista’, según ha comentado el especialista en Microsoft, Paul Thurrot, en su cuenta de Twitter.
Windows 8 sigue produciendo titulares y rumores de todo tipo y aunque recientemente ha superado el 10 por ciento de cuota de mercado, su adopción es más lenta que la de Windows 7 y las críticas a su diseño se han sucedido desde su lanzamiento.
Aún ofreciendo un funcionamiento perfecto para tablets y equipos con pantalla táctil bajo una interfaz innovadora creada desde cero, el funcionamiento de Windows 8 para trabajos en escritorio ha sido ampliamente cuestionado y su interfaz Modern UI considerada inútil y hasta molesta en ordenadores personales ‘clásicos’.
La caída del mercado PC tampoco ha ayudado a impulsar el sistema operativo y de ahí la calificación de Windows 8 ‘el nuevo Vista’. Comparación quizá exagerada porque Vista fue un auténtico fiasco -reconocido por Microsoft- y del que la firma solo pudo recuperarse con Windows 7.
Por su parte, Windows 8 ha sido revisado en tan solo unos meses con una actualización gratuita que ha llegado con Windows 8.1 facilitando su empleo en el escritorio con mejoras en la interfaz Modern UI. Además, se prevé un fuerte crecimiento del sector del tablet con Windows 8.1 y el sistema también podrá recoger la necesaria migración de equipos a la que obliga la próxima finalización del soporte de Windows XP.
Sin embargo, Paul Thurrot (y otros analistas) siguen sin ver claro el futuro de Windows 8 y aseguran que pronto «habrá un Windows 9 para arreglar el desastre que provocará Windows 8 como ya hizo Windows 7 con Vista». Windows 9 que ya está en desarrollo y que podría llegar antes de lo previsto, en abril de 2015 y con una versión beta que podría llegar en la próxima conferencia anual con desarrolladores, BUILD 2014, a celebrarse el próximo abril.
El nuevo sistema cliente unificaría los desarrollos actuales Windows 8/8,1, Windows Phone, Windows RT y hasta la implementación del sistema en la dashboard de Xbox One. Sería no solo multi-sistema y multi-dispositivo sino multi-plataforma, ya que soportaría arquitecturas x86 y ARM dejando a un lado definitivamente Windows RT.
Windows 9 (nombre en clave Windows Threshold) mejoraría la interfaz Modern UI estrenada en Windows 8 pero añadiría mayor flexibilidad para trabajos en el escritorio, incluyendo el comentadísimo
menú de inicio y permitiendo ejecutar aplicaciones Modern UI pero desde el escritorio en ventanas, salvando las críticas a esta interfaz.