Windows 10 ha alcanzado los 600 millones de dispositivos activos mensuales, según los nuevos datos de febrero de 2018 anunciados por Microsoft.
El último sistema operativo de Microsoft y el único en desarrollo sigue creciendo y ha aumentado en 100 millones de activaciones desde mayo de 2017 cuando se anunciaron los 500 millones y desde septiembre de 2016 en la conferencia Ignite 2016, donde se anunciaran los 400 millones de dispositivos activos.
El problema con Windows 10 es que siempre parece ser la botella “medio llena – medio vacía”. Por un lado Microsoft insiste en que se trata de “la adopción más rápida que han visto nunca en un sistema operativo”, pero por otro, está muy lejos de alcanzar los “1.000 millones de dispositivos en 2-3 años” que se había anunciado como objetivo.
Por otro lado, todavía no ha logrado superar a Windows 7 al frente del escritorio informático según los datos de la firma de análisis NetMarketShare, a pesar que es la única referencia de sistemas Microsoft.
Además, en los 600 millones de dispositivos activos se incluyen todo tipo de equipos y no sólo ordenadores, sino consolas Xbox, tablets o dispositivos de realidad virtual. Según Microsoft, Windows 10 tendría el 48% de esta base instalada:
Menos de lo pronosticado a pesar que ya no se venden PCs con Windows 7 u 8.1 y oficialmente, todos los equipos nuevos bajo la plataforma de Microsoft pre-instalan Windows 10. Además, Microsoft no va a mejorar ninguna característica de Windows 7 y 8.1, limitándose a lanzar parches de seguridad para ellos.
Otro punto a tener en cuenta es que sólo Windows 10 tiene soporte oficial para las nuevas plataformas como la 7ª Generación de Procesadores Intel® Core™ y sucesivas, es el único que puede manejar los nuevos dispositivos de realidad virtual basados en la plataforma Windows Mixed Reality, e incluye componentes exclusivos para el sistema como el navegador Edge y las librerías DirectX 12.
