Ante la creciente adopción de tecnologías que emplean Inteligencia Artificial, cada vez más empresas buscan incrementar sus plantillas con profesionales que dispongan de conocimientos y habilidades en ellas.
A medida que las organizaciones van adoptando tecnología basada en Inteligencia Artificial (IA), se ven en la necesidad de buscar nuevos perfiles profesionales con las habilidades suficientes para su gestión. Esto pone en evidencia el potencial existente para aquellos que tengan conocimientos de IA y puedan enseñar a las máquinas a aprender y pensar imitando las habilidades cognitivas humanas. Sin duda, se vislumbran grandes oportunidades en el aprendizaje automático.
Actualmente vemos el uso de Inteligencia Artificial en una amplia gama de productos que, paulatinamente, se está ampliando: automóviles que se conducen solos, robots que ayudan en múltiples tareas, equipos de computación capaces de distinguir los cánceres de piel peligrosos de los lunares benignos, así como un sinfín de dispositivos inteligentes y asistentes digitales que ya están en millones de hogares.
Estas aplicaciones en expansión ha dejado en evidencia la escasez de trabajadores cualificados en este campo.
Aunque a nivel internacional ya estamos viendo muchos casos de escuelas y universidades en las que están incorporando el aprendizaje de Inteligencia Artificial, hoy en día urgen empleados en las organizaciones con capacitación o experiencia en IA.
Consecuencias de la escasez de profesionales
La escasez de estos profesionales está teniendo sus consecuencias en muchas corporaciones que están viendo cómo están perdiendo competitividad. Este lastre, además, tiene sus efectos en la economía de los países ya que, para muchos economistas, la IA puede cambiar la trayectoria económica de un país como ya hicieron la electricidad o la máquina de vapor.
Pero también tiene otra consecuencia positiva: la demanda de estos profesionales ha incrementado sus salarios.
El salario medio para los trabajadores relacionados con IA ha crecido un 11% en el último año
Según el portal de búsqueda de empleo Glassdoor, el salario medio para los trabajadores relacionados con IA ha crecido un 11% en el último año, pudiendo ganar una media de unos 123.000 dólares anuales. Esto hace que estos profesionales, junto a los que disponen de conocimientos en blockchain, ostenten los salarios más altos.
Aunque la IA cambiará nuestras vidas, la velocidad a la que lo haga dependerá de la disponibilidad de talento existente para su implantación. Algunos datos apuntan que la demanda de empleo en IA ha duplicado al del resto de puestos de trabajo en los dos últimos.
Sin embargo, este desajuste entre la oferta y la demanda puede tener fecha de caducidad. Algunos economistas apuntan que dentro de cinco años podría estar resuelto.
Ante este panorama, las universidades están tratando de mantenerse al día. La Universidad Carnegie Mellon comenzó a ofrecer este otoño el primer título universitario en Inteligencia Artificial que hay en Estados Unidos. ¿Seguirá esta estela el resto de países?
