Ante el crecimiento que está experimentando la inflación, las organizaciones deberán revisar sus presupuestos TI y los costes que asumen para tratar de maximizar sus inversiones. Con ello buscarán minimizar el impacto que esta situación económica está teniendo en sus negocios.
No cabe duda del fuerte impacto que está teniendo la situación macroeconómica que se vive a nivel mundial en las organizaciones de todo el mundo. Con una tasa de inflación que ha alcanzado el máximo histórico de los últimos 40 años y una recesión global a la vista, no cabe duda de que los costes están aumentando en todos los ámbitos.
Esto conlleva nuevos desafíos para los CIO que tienen que evaluar, justificar y, en última instancia, reducir el gasto TI ante esta delicada coyuntura. En este sentido, un área específica en el que se pondrá un especial foco es en la cantidad que se invierte en software como servicio (SaaS).
El gasto en SaaS representa hasta el 12,7% del gasto TI en muchas organizaciones
En muchas organizaciones actuales, el gasto en SaaS representa hasta el 12,7% del gasto TI total, lo que lo convierte en uno de los mayores costes por detrás de los salarios. El problema, sin embargo, es que esta área es la que se verá afectada casi de inmediato por el aumento de la inflación.
La razón se debe en el hecho de que hasta el 88% de los proveedores de software tienen cláusulas en sus contratos que les permiten cambiar sus precios en cualquier momento, en algunos casos sin necesidad de notificarlo a los clientes. Esto significa que, si aún no están implementando aumentos de precios, existe la posibilidad de que lo estén considerando.
Ante esta situación, ¿cómo pueden las organizaciones mantener bajos los gastos de SaaS frente a las crecientes tasas de inflación?
Tres claves para hacer frente a la inflación
Según Robert Naegle, analista y vicepresidente de Gartner, las empresas, y más específicamente los CIO, tienen tres opciones cuando a la hora de prepararse para el impacto de la inflación en sus presupuestos de TI.
Estas opciones son, gastar lo mismo y hacer menos, gastar más y hacer lo mismo, o probar y optimizar para gastar lo mismo y hacer lo mismo.
Afortunadamente, si bien las organizaciones pueden haber llegado a depender en gran medida de las aplicaciones de software, con toda probabilidad existen oportunidades para reducir el coste de SaaS.
El 74% de los proveedores han aumentado sus precios desde 2019
Para comprender dónde se encuentran estas oportunidades, primero hay que observar el impacto que la inflación está teniendo en los precios de los proveedores de SaaS.
A partir del análisis de más de 10.000 contratos de SaaS, se extrae que el 74% de los proveedores han aumentado sus precios desde 2019. Ahora, aunque se esperan nuevos aumentos en los precios, es evidente que la tasa de inflación de SaaS es alrededor de cuatro veces mayor que la tasa de inflación del mercado.
Por ejemplo, el gasto en SaaS en el Reino Unido y Australia está aumentando a un ritmo cinco veces mayor que la inflación del mercado. En Canadá y Estados Unidos es hasta 4,3 y 3,5 veces más, respectivamente.
La importancia de los datos
En consecuencia, la inflación de los precios de SaaS está superando la inflación del mercado. Sin embargo, algunos proveedores de tecnología continúan utilizando la inflación para realizar una subida de precios notable, a pesar de que la inflación del mercado es mucho más baja.
Por eso es importante que las organizaciones sean capaces de comparar la inflación de SaaS con la inflación del mercado, lo que puede ser muy útil a la hora de negociar con los proveedores. De hecho, al contar con estos datos económicos, las empresas estarán en una posición mucho más sólida para hacer contraofertas.
Hasta el 55% de los proveedores esconde sus precios, lo que hace difícil aprovechar el mejor coste posible
No obstante, los datos económicos no son los únicos datos que se pueden aprovechar para reducir el gasto en SaaS.
Uno de los mayores retos para cualquier comprador de SaaS es la falta de transparencia de precios en el mercado. Con hasta el 55% de los proveedores esconde sus precios, es fácil quedarse sin un marco de referencia, lo que hace que sea difícil aprovechar el mejor coste posible.
Incluso para el 45% de los proveedores que comparten sus precios, no hay una manera fácil de saber si están a ofrecer un descuento y cuánto están pagando realmente otras empresas. Sí es posible extraer información de algunos sitios de comparativas, o encontrar una referencia obsoleta de los precios de un proveedor en un foro, pero estos datos a menudo están fragmentados y no son fiables.
Sin duda, todo un reto para los CIO que necesitan conocer con fiabilidad estos datos para sacar el mejor provecho de sus inversiones.
Imagen inicial | Karolina Grabowska
