Los avances en tecnología han cambiado no solo nuestra forma de entender el mundo, sino que también la manera en la que desarrollábamos las actividades económicas y las relaciones empresariales. En este sentido, la tecnología le ha dado una vuelta de 180º a la forma en la que las empresas recopilan, procesa y utilizan los datos.
Son muchos los expertos que afirman que en la actualidad nos encontramos inmersos en la que es la Cuarta Revolución Industrial. Y es que si los protagonistas de las anteriores fueron el motor de vapor y el ferrocarril, la electricidad y el Internet respectivamente, esta nueva etapa la configura la Inteligencia Artificial y el Data-Driven.
Los datos se presentan como el medio para mejorar la eficacia, la productividad y la rentabilidad
De la misma manera que Internet cambió la forma en la que se realizaban las actividades económicas y comerciales, ahora le llega el turno para tal fin a la IA, con una transformación que será mucho mayor a la anterior. Este cambio viene definido por la transformación de las compañías hacia empresas data-driven, basándose en datos y modelos.
La necesidad de la transformación
Lo cierto es que aunque muchas organizaciones ya se encuentran inmersas en este desarrollo, hay otras tantas que aún tienen un largo camino que andar para llegar a ello. Sin embargo, aunque el cambio no se haya hecho efectivo en la totalidad de las empresas, éstas son conocedoras de que la gestión y la explotación de los datos son vitales a día de hoy como parte de la estrategia empresarial.
Los datos se presentan como el medio para optimizar los procesos internos, facilitar la toma de decisiones y en definitiva, mejorar la eficacia, la productividad y la rentabilidad de cada una de las empresas, ya que los datos permiten entender mejor a los clientes y las plantillas de trabajo, consiguiendo que sean más rápidas y productivas.
Así las empresas data-driven se entienden como el futuro más inminente y es que los datos nos permiten conocer mejor a nuestro público, contextualizarlo y personalizar todas las comunicaciones.
Los datos como eje vertebrador empresarial
Los datos aparecen en escena como el eje vertebrador en el que girará todo el devenir de las empresas en los tiempos actuales. Bajo esta premisa, y gracias a la digitalización, cada vez son más las organizaciones que hacen uso de los datos para mejorar con ello sus procesos y sacar mayor rentabilidad.
Esta transformación basada en el dato puede observarse en todos los sectores económicos, sin distinción, sin embargo algunas compañías van más allá de lo que es la gestión de la información y emplean los datos como base de su actividad profesional, es entonces cuando nos encontramos ante empresas data-driven.
Las empresas data-driven deben contar con profesionales que garanticen que los datos recogidos y comunicados son de calidad
Así pues las empresas data-driven se distinguen de las que no lo son por la integración que realizan de los datos. Aunque son cada vez más organizaciones las que emplean los datos como herramienta de ayuda adicional, las empresas data-driven realizan una total integración de los datos de forma que todos sus sistemas se encuentran interconectados.
Las empresas data-driven deben contar con profesionales que garanticen que los datos recogidos y comunicados son de calidad
Pero ser empresa data-driven no está lejos del factor humano. Lo cierto es que estos modelos de compañías deben rodearse de profesionales altamente cualificados. Y es que aunque los datos forman parte imprescindible en la toma de decisiones y estas deben estar avaladas por la información obtenida de su análisis exhaustivo, se necesita de un equipo preparado para interpretarlos adecuadamente.
Características de las empresas data-driven
Los datos han llegado a nuestros días para convertirse en el eje central de las actividades económicas empresariales, desarrollando para ello estrategias que les hacen mejorar sus niveles de eficiencia y eficacia. Este modelo de negocio se caracterizan por:
- Empleo de herramientas de análisis de datos para controlar Indicadores Clave de Rendimiento o KPI.
- Normas internas específicas para la gestión y utilización ética de los datos.
- Recopilación exhaustiva de la información.
- Uso de herramientas estadísticas necesarias para gestionar los datos en tiempo real y mejorar la toma de decisiones.
- Comunicación constante entre todos los miembros de la empresa.
Plan de estrategia de las empresas data-driven
Como venimos hablando, los datos se están convirtiendo en el eje central de las empresas y cómo con su empleo se puede formular una estrategia de forma eficiente. En este sentido los datos aportan una serie de ventajas que hacen que las organizaciones se vean beneficiadas. Un plan de estrategia basada en los siguientes elementos:
- Información actualizada.
- Marketing específico.
- Objetividad en las decisiones que se toman, lo que permite el crecimiento de la eficiencia y la competitividad.
- Identificación de nuevas oportunidades del mercado y mayor captación de clientes.
- Agilización de los procesos.
- Ahorro de costes.
- Aumento de la productividad ya que los datos predicen los diferentes escenarios posibles, desarrolla mejores estrategias de competitividad y trazan estrategias de mayor fiabilidad.
En definitiva, las empresas data-driven desarrollan un plan estratégico que basándose en los datos toman decisiones seguras y con garantías. Los datos son el eje central en los procesos, estrategias y toma de decisiones. Un uso eficiente de la información que les permite prosperar y crecer.
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