Nos esperan PCs más caros para el tercer trimestre de 2017. Los vendedores de PCs, con el fin de reflejar los aumentos continuos en el coste de los componentes, subirán el precio de venta al cliente final de los nuevos equipos.
Una información de la cadena de suministro en Asia que no es positiva para la recuperación del sector, aunque ya era conocida y se antoja inevitable para mantener los márgenes.
La escasez y subida de costes de los componentes es notoria con especial incidencia en las unidades de estado sólido que pueden subir entre un 20 a un 25 por ciento en el próximo trimestre y con ello, limitar la capacidad de los portátiles como veíamos la semana pasada.
No solo SSD. Otros componentes derivados como las DRAM también están subiendo de precio, al igual que los paneles de visualización o las baterías. Las fluctuaciones del tipo de cambio tampoco ayudan y se esperan PCs más caros tanto en portátiles como sobremesas en los nuevos equipos con procesadores Intel Kaby Lake que se comercializarán el próximo trimestre.
También se espera que la escasez de componentes presione a los vendedores de PCs más pequeños, porque los grandes fabricantes tendrán prioridad en la colocación de grandes pedidos. La concentración de venta en torno a los mayores fabricantes es una tendencia al alza como pronosticaban las consultoras.
No son buenas noticias para frenar la sangría de ventas de ordenadores personales que sufrimos desde hace muchos trimestres. IDC ya pronosticó que el mercado PC no remontaría en los próximos cinco años.