Las telcos pierden interés en las franquicias

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Encontrarse en un centro comercial o a pie de calle una tienda franquiciada de Movistar, Vodafone, Orange o Yoigo cada vez será más complicado. Aunque hubo una época en la que la apertura de nuevas tiendas eran prácticamente diarias, de un tiempo a esta parte parece que las telcos no están muy interesadas en expandir más esta vía de negocio.

La variación en las condiciones de los franquiciados de Yoigo ha hecho que salte la voz de alarma. Según nos cuentan nuestros compañeros de MuyComputerPro, decenas de distribuidores de la telco tendrá que cerrar sus puertas por el cambio de contrato impuesto por el intermediario ByMovil donde se rescinde el mismo a fecha de 30 de junio de 2017.

Entre las nuevas cláusulas que se les imponen a los franquiciados de Yoigo está la supeditación de sus comisiones en base a unos objetivos que no están marcados ni regulados. Además, la compañía se reserva el derecho de cerrar la tienda si no alcanza los objetivos durante dos meses. Un asunto que no requeriría indemnización ya que el cierre tendría justificación y no sería arbitrario.

Los franquiciados de Yoigo se quejan de competencia abusiva

La principal queja de los franquiciados, junto con la actitud y los términos impuestos por ByMovil, es que no tienen la posibilidad de ponerse en contacto directamente con Yoigo. Además, critican que el servicio de venta telefónica y la web del operador cuenta con ofertas con las que ellos no pueden competir, e incluso afirman que, en algunas ocasiones, el servicio de venta telefónica les ha llegado a “robar” clientes.

Movistar, Vodafone y Orange, tampoco quieren franquicias

La problemática dentro de Yoigo no parece que sea algo puntual sino más bien un hecho encuadrado en la estrategia que están teniendo las grandes telcos en España. Un planteamiento en el que las operadoras no están interesadas en abrir nuevas franquicias. No hay más que ver los complicados procesos de alta para ser distribuidor o los pocos recursos actualizados.

El caso más sangrante es el de Orange. La compañía remitía hace ya unos años a los candidatos a abrir una franquicia a una dirección postal. Un espacio en el que los interesados en la franquicia aseguraban no recibir respuesta. Ningún dato más.

En Movistar no mejora la situación. Si bien es cierto que los foros de atención al cliente contestan con una opción de contacto, al remitirnos a la misma entramos en portal para distribuidores de 2003 donde no nos resuelven nada.

Por su parte, Vodafone cuenta con un formulario bastante desactualizado. La operadora británica, por lo menos, ofrece una vía relativamente directa de contacto. Eso sí, la opción habla de convertirse en distribuidor de la casa pero solo para empresas, no hemos encontrado ninguna opción para particulares.

Con este panorama queda claro que las tiendas físicas no parecen interesar a las operadoras. Un negocio donde han entrado otros actores como Phone House, HolaMobi o Blablatel para cubrir ese mercado que están abandonando las grandes. Un nicho clave siendo la telefonía uno de los segmentos con más auge dentro de la electrónica de consumo.

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Coordinadora editorial de MuyCanal. Danzando día a día entre partners, mayoristas y fabricantes para profundizar en el canal de distribución tecnológico.