Con 43 tiendas que se cerrarán y 650 empleados a las listas del paro. Este es el balance más negativo de la salida de Darty, antiguo Menaje del hogar, de España. El grupo ha decidido potenciar los mercados de Francia, Bélgica y Países Bajos y dejar otros menos rentables como República Checa, Eslovaquia y España. De hecho, oficialmente Alan Parker, presidente de la cadena, explicaba:
«Mejorar significativamente nuestra posición en España sería un largo y potencialmente costoso viaje sin garantías de éxito en lo que seguiría siendo un mercado muy complicado».
El proceso de cierre de Darty se hará totalmente efectivo el próximo 30 abril de 2014. En ese momento, quedarán cerradas las 43 tiendas de Darty en España. Un proceso que tendrá un coste de 30 millones de euros además de 10 millones más por la disposición de activos fijos.
Las malas cifras en los últimos tiempos han provocado el cierre de Darty. Desde que comenzaron a operar en España bajo la marca Darty en 2007 hasta el 30 de abril de 2012 las pérdidas ascendieron a 74 millones de euros. En el último ejercicio de 2012 a 2013 se preveía facturar unos 120 millones de euros con unas pérdidas operativos de 16 millones. Sin embargo, todo apunta a que los objetivos no se han cumplido.
Las grandes se van de España
No es la primera gran cadena de electrónica que abandona España desde que estalló la crisis. PC City fue una de las primeras que decidió irse ante las malas expectativas económicas que ya se apuntaban. Le siguió Pixmanía que decidió seguir vendiendo vía on-line. Más actual es la desaparición de Saturn, una de las marcas comerciales del grupo Saturn-Media Markt. Ahora le toca el turno a Darty.
Con este panorama es más que evidente que el consumo de electrónica no pasa por su mejor momento en España. De hecho, estos son solo ejemplos de grandes del terreno, pero si nos vamos a tiendas más locales o franquicias veremos que la situación no mejora.
¿Es hora de reinventarse? ¿De buscar nuevos modelos de negocio? ¿De actualizar las líneas clásicas?