2018 se perfila como un año de consolidación para el Blockchain. Las bases de datos distribuidas se convertirán en una fórmula de proteger la información sobre la que no solo se basarán las criptomonedas sino también muchas empresas. ¿Es el momento de indagar más? Seguramente, sí.
El interés por Blockchain, como decíamos, no se centra solo en Bitcoin. Ya que los datos almacenados en la cadena de bloques sirven, sobre todo aunque no exclusivamente, para realizar transacciones, se tornan como un sistema en el que ya se han fijado las empresas. Google, Mapfre, IBM o Goldman Sachs son parte activa de este interés que se ha traducido en inversiones y proyectos.
El movimiento es tal que más de la mitad de los responsables TI de grandes organizaciones esperan adoptarlo en los próximos años y casi el 70% se ha puesto como reto finales de 2018. Una fecha que apunta a ser clave para la maduración de estas cadenas de bloques que permiten gestionar y proteger las transacciones y conexiones de una forma diferente.
De hecho, esta cadenas de bloques vendrían a solucionar el principal problema que causa retrasos con los bancos. Dado que los registros que se llenan en Blockchain no pueden modificarse, tendría el valor añadido de reducir los fallos en los intercambios monetarios a la mínima expresión.
No es el único uso ya que podría servir como sistema de validación de registros y contratos o mejorar las capacidades de herramientas de colaboración entre empresas. Todo directamente relacionado con el mundo conectado (IoT, M2M) que está llegando.
El auge de esta tecnología no es baladí. La apertura de posibilidades innovadoras que presenta es un hecho que se consumará en un futuro cercano. Lo explica uno de los propulsores más fervientes, Don Tapscott:
«Blockchain permitirá a las compañías eliminar los costes de las transacciones y usar esos recursos externos más fácilmente en su interior. En muchos casos, las redes basadas en esa tecnología serán mejores para crear productos y servicios que ofrezcan más valor a los accionistas».
El eterno reto de formarse
Viendo las posibilidades de esta tendencia es evidente que estamos ante un terreno por descubrir. Una puerta abierta llena de posibilidades que encajan en casi cualquier mediana y gran empresa que busque ser más ágil, productiva e innovadora.
Rentabilizar y comenzar a trabajar con Blockchain requiere, como es evidente, una base de conocimientos en los que sustentar nuestra estrategia de llegada a los clientes finales. Un eterno reto para partners tecnológicos que se da una y otra vez con cualquier nueva tendencia TI.
Un proceso de formación que para muchos ya ha comenzado. Blockchain, tal y como apunta un estudio de Upwork, ya es la segunda formación que más crece entre los profesionales independientes. Aunque este hecho está muy relacionado con la creciente popularidad de Bitcoin, también supone un impulso para mejorar la entrada en las compañías.
Blockchain es la segunda formación que más rápido crece
Los primeros en profundizar en Blockchain ya ven la oportunidad de negocio que supone. Unos visionarios que serán capaces de especializarse y encontrar el camino para explotar estas cadenas de bloques con sus clientes. Y esa visión de futuro puede ser la clave entre aquellos partners que triunfen en el sector y los que lleguen tarde o directamente, desaprovechen la oleada.
Sin embargo, es cierto que todavía estamos en un estadio de descubrimiento y asentamiento del Blockchain. Un primer paso donde el desconocimiento es lógico pero no es excusa para ningún proveedor. De ahí que cada uno deba entender el fenómeno para encontrar su espacio y acoplar esta tecnología a su modelo de negocio. A partir de ahí, profundizar será obligatorio para mostrar a las empresas el camino a seguir.
Imagen | Chris Becker
