¿Merece la pena seguir apoyando el Bitcoin?

Parece que ha pasado un siglo desde que el Bitcoin consiguió sobrepasar los 19.000 dólares. Unos 8 meses en los que hemos visto que aquello que subió con tanta fuerza a mediados del pasado año se fue desinflando casi con la misma intensidad. Aquello que parecía que iba a revolucionar las finanzas y prometía ser El Dorado para muchos se ha convertido en poco más que una forma de invertir más. Pero ¿es solo eso?

A decir verdad el Bitcoin ha demostrado ser más que una moneda virtual basada en Blockchain. El Bitcoin fue el detonante para que muchos comenzarán a ver otras fórmulas financieras ajenas a los bancos, para que las grandes tecnológicas se plantearán su uso y para que la cadena de bloques en la que se basa su sistema tuviera un pico de interés.

Sin embargo, la oleada del Bitcoin hace unos meses que pasó. De ahí que sea evidente que como vendedor, proveedor tecnológico o simplemente comprador te pregunte ¿merece la pena seguir apostando por este método de pago? ¿tendrá un futuro la criptomoneda más famosa o debemos mirar más profundamente para sacar provecho?

A algunos todavía les vale la pena

Muchos detractores de las criptomonedas advertían en el momento más álgido del Bitcoin su alta volatibilidad. Esa misma que hizo que a partir de diciembre de 2017, la moneda virtual comenzara a caer hasta los 7.700 dólares actuales, después de unos últimos días de ligeras subidas.

A partir de ese momento muchos dejaron de creer en las criptomonedas. Sin embargo, fue justo entonces cuando Square lanzó la posibilidad de pagar a través de esta moneda. Una funcionalidad que, vistos los resultados del segundo trimestre de 2018, le ha reportado un buen rendimiento. La compañía especializada en TPV y sistemas de pago ha hecho 37 millones de dólares gracias a este soporte.

Square ha ingresado 37 millones gracias al soporte Bitcoin

Aunque la lista de vendedores que aceptan Bitcoin se ha ido reduciendo a media que el fuego se ha apagado, todavía quedan algunos, cifrados en más de 100.000 por algunas plataformas como Spend Bitcoins, que se niegan a abandonar este método de pago y compra.

Incluso algunos fabricantes como HTC se plantean introducir la opción de pago con Bitcoin en sus próximos terminales. Una característica que apoyaría esta fórmula financiera.

Sin embargo, son de los pocos casos de éxito que nos podemos encontrar alrededor de la criptomoneda referencia. Otros competidores como PayPal aseguraban ya hace unos meses que no estaban dispuestos a confiar en Bitcoin hasta que no fuera un sistema más fiable y menos volátil. E incluso los grandes han ido sigilosamente separándose de esta moneda.

Cautela siempre

Aunque recomendar una senda u otra es muy complicado, lo cierto es que el momento álgido de Bitcoin ha pasado. No sabemos si volverá o si conseguirá realmente ser «una mejor moneda» como buscaba el CFO de PayPal pero claramente su época gloriosa ha caducado hasta nuevo aviso.

La calma que propicia este momento ayuda a ver con un poco de distancia el Bitcoin. Esa que invita a reflexionar sobre las luces y sombras de esta criptomoneda, en concreto, y la revoluciones tecnológicas, más en general.

Y es que como tendencia TI que fue el Bitcoin había que precisamente tomarlo con cautela. Es cierto que las oleadas innovadoras llegan de pronto pero también es necesario ser conscientes de su trascendencia y hasta dónde pueden llegar.

Detrás de la tormenta debe haber un momento de reflexión

En este sentido, era evidente que esta moneda virtual suponía un cambio de paradigma; una nueva forma de invertir y generar dinero que podía marcar el antes y después de una era. Como tal entender la oleada por parte del canal TI era obligatorio pero también poner cordura en un momento de máximo revuelo. Comprender que Bitcoin era importante pero también entender por qué.

Lo más interesante de Bitcoin no era la propia moneda sino lo que había debajo de ella. Un sistema de encriptación tan sofisticado que se puede utilizar para fines tan avanzados como la gestión de un sistema financiero independiente. Y es ahí donde el canal TI debía y debe trabajar.

Así pues, el Bitcoin nos ha enseñado nuevamente, que detrás de todas las explosiones TI, debe haber un momento de reflexión. Un espacio para entender qué puede aportar esa nueva tecnología a nuestro negocio y el de nuestros clientes, cómo debemos implementarlo y si realmente nos merece la pena apoyarlo. ¿Y merece?

Artículo AnteriorSiguiente Artículo
Coordinadora editorial de MuyCanal. Danzando día a día entre partners, mayoristas y fabricantes para profundizar en el canal de distribución tecnológico.