A pesar de la incertidumbre económica y de los problemas que la inflación está conllevando para muchas economías, la inversión TI sigue siendo clave para las organizaciones, e incluso seguirá creciendo en los próximos meses.
Tal y como se desprende del informe publicado por CCS Insight, para el que se han encuestado a 1.123 líderes de TI de diversas industrias, predominantemente de Europa y Estados Unidos, la inversión tecnológica se mantiene pese a las condiciones macroeconómicas actuales.
Más del 80% de las empresas esperan que su inversión TI crezca a lo largo de los próximos 12 meses, ya que la transformación digital sigue siendo un imperativo para ellas para apoyar la recuperación tras la pandemia y para protegerse frente a futuras interrupciones de sus negocios.
Sin embargo, con una recesión global en el horizonte, el panorama general es menos halagüeño que en 2021. Por ejemplo, la proporción de empresas que esperan un aumento de más del 15 % en su inversión TI se ha reducido en aproximadamente una tercera parte respecto al año anterior.
Las empresas deben hacer frente a toda una serie de desafíos de TI que se ven agravados por las condiciones económicas, incluidas las dificultades para contratar y retener talento, el aumento de los costes y los retrasos en las entregas de hardware.
Teniendo esto en cuenta, más del 40% de las empresas prevé retrasos en los proyectos de TI, y casi la misma cantidad espera subcontratar algunos servicios y aplicaciones de TI en los próximos meses mientras hacen malabarismos con los presupuestos y los recursos.
Pero, ¿cuáles son las principales prioridades de inversión TI para las empresas?
Seguridad y cloud, claves para la inversión TI
La seguridad sigue siendo la principal prioridad para el 33% de los líderes de TI, una tendencia que ya se ha venido dando en los últimos años. Los ciberataques, el phishing, el malware y el ransomware, así como los dispositivos no seguros conectados a Internet generan preocupaciones de seguridad en las empresas, que se han visto desbordadas por el aumento de las superficies de ataque ante el auge del trabajo remoto e híbrido.
Esto lleva a que la inversión en operaciones de TI y la gestión de servicios sea clave para el 27% de los líderes, superando a los servicios en la nube con un 26%, algo a lo que contribuye el creciente grado de madurez de la digitalización en muchas organizaciones.
Por otra parte, sigue la transición acelerada a la nube provocada por la pandemia, ya que las empresas la consideran fundamental para la resiliencia y la agilidad. Atendiendo a los resultados de la encuesta, desde CCS Insight prevén que casi la mitad de todas las cargas de trabajo ahora están alojadas en la nube, lo que significa un aumento de más del 25% en solo dos años.
Las empresas esperan llevan el 73% de las cargas de trabajo en la nube a mediados de 2025
En este sentido, las empresas siguen siendo optimistas y confían en que el 73% de las cargas de trabajo estén en la nube a mediados de 2025.
Como Microsoft como el proveedor de nube más utilizado, en concreto por el 64% de las empresas, cada vez más irá ganando importancia la nube híbrida y los entornos multicloud, ya que, actualmente, el 76% de las empresas tiene más de un proveedor de nube, frente al 55 % hace un año.
Otra tecnología que seguirá ganando peso en las organizaciones es la Inteligencia Artificial (IA). Actualmente, casi el 60% de las empresas ya han implementado aplicaciones de IA en producción, frente al 45% de 2021.
Sin embargo, esta mayor omnipresencia también conlleva desafíos, con la confiabilidad de los sistemas como la principal preocupación para el 31% de los responsables de toma de decisiones.
Apuesta por los entornos híbridos
Otro de los aspectos destacados del informe de CCS Insight apunta que los líderes de TI consideran que los modos de trabajo se han estabilizado después de la pandemia.
El trabajo de oficina a tiempo completo sigue desempeñando un papel destacado, ya que el 40% de la fuerza laboral está volviendo a las oficinas y se espera que esto se mantenga constante hasta 2024. No obstante, desde otro prisma, esto significa que el 60% de los empleados trabajan en entornos remotos híbridos.
Si bien los empleados están de acuerdo en que el trabajo híbrido es el camino a seguir, solo el 12% de los trabajadores quieren trabajar en una oficina a tiempo completo. Esto indica posibles desafíos para las empresas si los empleados deciden buscar en otra parte un puesto que se adapte mejor a sus preferencias.
El 38% de las empresas espera invertir en herramientas de automatización del flujo de trabajo
En el contexto, el problema de reclutar y retener a los mejores talentos se volverá cada vez más importante para las empresas, lo que pondrá de relieve la relevancia de la experiencia de los empleados.
En la parte superior de las prioridades de inversión de las empresas se encuentra la tecnología de monitorización de experiencia digital, con el 41% de las empresas planeando invertir en estas herramientas en los próximos 12 meses.
Además, el 40% espera comprar herramientas de gestión del trabajo para respaldar la coordinación del trabajo en una era híbrida, y el 38% planea invertir en herramientas de automatización del flujo de trabajo para reducir las tareas repetitivas y aburridas para los empleados y dar cabida a actividades más valiosas y gratificantes.
El avance del metaverso
Otro de los aspectos relevantes de la encuesta muestra que el 53% de las empresas cree que el metaverso tendrá un impacto significativo en su negocio en los próximos cinco años, y solo el 6% no espera ningún impacto.
Los escenarios más populares en los que aportará valor comercial son el compromiso de los empleados, la colaboración y la capacitación y la visualización de datos, cada uno de los cuales se puede lograr hoy con XR o tecnología inmersiva, lo que sugiere que la mayoría de los tomadores de decisiones de TI combinan el metaverso con XR.
Todo esto pone de relevancia que la inversión TI sigue siendo una prioridad para las empresas, no solo en las operaciones diarias, sino también en ayudar a las empresas a innovar y diferenciarse.
La transición a la nube seguirá siendo fundamental para competir en muchas industrias. Y, pese a que la inversión en TI no es inmune al clima económico, los próximos tres años verán un gran cambio transformador en las empresas.
Imagen inicial | Towfiqu barbhuiya